Hace tiempo escribí un post acerca del nudismo, pronunciándome dispuesta a intentarlo, e incluso me permitió conocer el interesante blog de wangsheng, que me abrió las puertas a otros sitios de discusión nudista. Desde entonces he venido comentando con mis amigos acerca de ello, todos compañeros de universidad. Las reacciones que he obtenido son diversas, pero he aquí algunos de los puntos principales (como no hice una encuesta propiamente dicha, no puedo dar cifras exactas):
1. Casi todos los varones están dispuestos a experimentar el nudismo.
2. La mayoría de mujeres respondieron que no. Sólo dos de ellas estuvieron de acuerdo "si lo hacían con su pareja"
3. Casi todos los hombres dijeron que estaban dispuestos a desnudarse si todos lo hacían (gregarios).
4. Aquellas dos mujeres que estuvieron de acuerdo, opinaron lo mismo.
5. Todos los dispuestos estuvieron de acuerdo en experimentar el nudismo lejos de la familia.
6. A todos los dispuestos les gustaría empezar en un club, playa o asociación, es decir, rodeados de desconocidos, lejos de los amigos y compañeros habituales.
7. La mayoría de los varones dispuestos dijeron que lo anterior sería un buen lugar para "conocer chicas".
8. De la mayoría de mujeres que dijeron que no, casi todas lo hicieron porque decían tener desconfianza en los hombres, pero admitieron que podrían cambiar de opinión si estarían mejor informadas.
Particularmente sigo practicando el nudismo de interior cada vez que puedo (o sea cuando no hay nadie) pues me resulta difícil aún exponerme ante otras personas como testimonio. De todas formas, ello no me ha impedido arribar a las siguientes conclusiones:
A. Los varones todavía asocian el nudismo con el morbo, y no tienen ningún inconveniente en desnudarse siempre y cuando eso les permita ver chicas desnudas. A un amigo muy querido, que se precia de ser muy liberal y tolerante, le pregunté si estaba a favor del nudismo ¿saben qué me dijo? Mmmm... bueno, estéticamente, no, porque hay unos cuerpos que no quisiera ver ni en pintura... Obviamente ni siquiera captó la esencia del nudismo: la libertad. Haría falta entonces, para empezar, mucha información hasta romper el mito de que sólo los bonitos tienen derecho a mostrar el cuerpo, o el mito de que todo nudismo es obsceno. Probablemente la desinformación venga de la cantidad de páginas porno de internet que asocian ambas ideas impúdicamente.
B. A pesar de todo, me siento desprotegida. Cuando salgo a la calle no falta un imbécil que me lance un requiebro obsceno, desde "mamacita" hasta "quisiera ser tu calzón para meterme entre tus nalgas". Y las frases aumentan de calibre a medida que disminuye la prenda ¿Qué será si un día me animo a hacer topless en la playa? Una vez vi a una chica que lo hizo (una turista alemana) casi al instante los hombres empezaron a sacar sus celulares para fotografiarla sin ningún reparo ni vergüenza. La pobre al final tuvo que cubrirse nuevamente, porque nadie, por más nudista que sea, quiere sentirse como un objeto de vitrina. Pienso que todavía nos falta acostumbranos a la desnudez ajena. Somos una sociedad pacata en la que cualquier pezón al aire hace un titular. Todos los intentos de promover el nudismo terminan en la zona rosa del diario local. Mientras eso no cambie, creo que siempre me sentiré desprotegida estando sola y desnuda. Si lo hace un hombre: loco. Si lo hace una mujer: puta. Comparto el punto 2 arriba citado.
C. Finalmente, el hecho de que la mayoría esté dispuesta a probar el nudismo fuera de la familia y amigos, en medio de nudistas reales, podría reflejar un deseo de libertad contradictoria: quiero ser libre, pero lejos de aquí. Por un lado experimento una comodidad total estando desnuda, pues siento que mi ropa pesa más que la tela de la que está hecha. Al despojarme de ella me arranco las inhibiciones, fobias, manías y represiones que hacen más difíciles las relaciones interpersonales y obstaculizan una interacción fluida y sincera. Pero por otro lado, para hacerlo me gustaría que otros sintieran lo mismo y tengan la misma convicción, pues no me gustaría estar desnuda en medio de tipos me van a mirar con el celular en la mano.
Valiente para pensar, cobarde para actuar. Toda una tragedia hamletiana.
1. Casi todos los varones están dispuestos a experimentar el nudismo.
2. La mayoría de mujeres respondieron que no. Sólo dos de ellas estuvieron de acuerdo "si lo hacían con su pareja"
3. Casi todos los hombres dijeron que estaban dispuestos a desnudarse si todos lo hacían (gregarios).
4. Aquellas dos mujeres que estuvieron de acuerdo, opinaron lo mismo.
5. Todos los dispuestos estuvieron de acuerdo en experimentar el nudismo lejos de la familia.
6. A todos los dispuestos les gustaría empezar en un club, playa o asociación, es decir, rodeados de desconocidos, lejos de los amigos y compañeros habituales.
7. La mayoría de los varones dispuestos dijeron que lo anterior sería un buen lugar para "conocer chicas".
8. De la mayoría de mujeres que dijeron que no, casi todas lo hicieron porque decían tener desconfianza en los hombres, pero admitieron que podrían cambiar de opinión si estarían mejor informadas.
Particularmente sigo practicando el nudismo de interior cada vez que puedo (o sea cuando no hay nadie) pues me resulta difícil aún exponerme ante otras personas como testimonio. De todas formas, ello no me ha impedido arribar a las siguientes conclusiones:
A. Los varones todavía asocian el nudismo con el morbo, y no tienen ningún inconveniente en desnudarse siempre y cuando eso les permita ver chicas desnudas. A un amigo muy querido, que se precia de ser muy liberal y tolerante, le pregunté si estaba a favor del nudismo ¿saben qué me dijo? Mmmm... bueno, estéticamente, no, porque hay unos cuerpos que no quisiera ver ni en pintura... Obviamente ni siquiera captó la esencia del nudismo: la libertad. Haría falta entonces, para empezar, mucha información hasta romper el mito de que sólo los bonitos tienen derecho a mostrar el cuerpo, o el mito de que todo nudismo es obsceno. Probablemente la desinformación venga de la cantidad de páginas porno de internet que asocian ambas ideas impúdicamente.
B. A pesar de todo, me siento desprotegida. Cuando salgo a la calle no falta un imbécil que me lance un requiebro obsceno, desde "mamacita" hasta "quisiera ser tu calzón para meterme entre tus nalgas". Y las frases aumentan de calibre a medida que disminuye la prenda ¿Qué será si un día me animo a hacer topless en la playa? Una vez vi a una chica que lo hizo (una turista alemana) casi al instante los hombres empezaron a sacar sus celulares para fotografiarla sin ningún reparo ni vergüenza. La pobre al final tuvo que cubrirse nuevamente, porque nadie, por más nudista que sea, quiere sentirse como un objeto de vitrina. Pienso que todavía nos falta acostumbranos a la desnudez ajena. Somos una sociedad pacata en la que cualquier pezón al aire hace un titular. Todos los intentos de promover el nudismo terminan en la zona rosa del diario local. Mientras eso no cambie, creo que siempre me sentiré desprotegida estando sola y desnuda. Si lo hace un hombre: loco. Si lo hace una mujer: puta. Comparto el punto 2 arriba citado.
C. Finalmente, el hecho de que la mayoría esté dispuesta a probar el nudismo fuera de la familia y amigos, en medio de nudistas reales, podría reflejar un deseo de libertad contradictoria: quiero ser libre, pero lejos de aquí. Por un lado experimento una comodidad total estando desnuda, pues siento que mi ropa pesa más que la tela de la que está hecha. Al despojarme de ella me arranco las inhibiciones, fobias, manías y represiones que hacen más difíciles las relaciones interpersonales y obstaculizan una interacción fluida y sincera. Pero por otro lado, para hacerlo me gustaría que otros sintieran lo mismo y tengan la misma convicción, pues no me gustaría estar desnuda en medio de tipos me van a mirar con el celular en la mano.
Valiente para pensar, cobarde para actuar. Toda una tragedia hamletiana.